El vapor de ozono frío es una técnica utilizada en tratamientos estéticos y de belleza. Este tipo de vapor se genera a través de un vaporizador que puede producir tanto vapor caliente como frío, y cuando se activa la función de ozono, se convierte el oxígeno en ozono, el cual es expulsado por el difusor¹.

Los beneficios del vapor de ozono frío incluyen:

• Cierra los poros: Ideal para finalizar tratamientos faciales, como plasma rico en plaquetas o limpiezas profundas.
• Efectos calmantes y antibacterianos: Ayuda a controlar el acné y a mantener la piel limpia y desinfectada.
• Oxigena los tejidos: Tiene propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas, lo que favorece la salud de la piel.

Este tipo de vaporización es apreciado por su capacidad para preparar la piel para otros procedimientos estéticos y por sus efectos positivos en la calidad y apariencia de la piel¹. Si estás interesado en este tratamiento, te recomiendo consultar con un especialista en estética para obtener más información y asesoramiento personalizado. ¿Hay algo más en lo que pueda ayudarte?